El retraso de la muerte modifica la estructura familiar y los roles de pareja

El ser humano ha ganado años de vida. En algunos países, como España, muchos años. De hecho, en el último siglo y medio los españoles han conseguido seis horas de vida para todos los días sobrevivir. Esta circunstancia modifica profundamente la estructura en la que se encuentra la sociedad en un silencioso pero decisiva, mientras que los gobiernos y las instituciones se centran en el reto económico (¿Qué pasará con las pensiones?, que mantenga el estado de Bienestar?) involucrados en esta nueva realidad.

 

Hace cien años instaló en España el umbral de 65 como el comienzo de la vejez, una figura que en este momento viven alrededor de 13.000 personas a la semana. Ahora la esperanza de vida en el momento del nacimiento es 80,4 años en hombres y 85.9 en mujeres. El porcentaje de la población de más de 65 años de edad en este momento es aproximadamente el 19% y se espera llegar a 25.6% en 2030. Datos y más datos que corroboran una realidad, el envejecimiento de la población de España gracias a una menor mortalidad infantil y a la extensión de la esperanza de vida, tienes que ser consciente de que el retraso de la muerte es modificando la estructura social y estos cambios deben tenerse en cuenta para la futura governanza.

 

El aumento en la esperanza de vida ha dado lugar a un aumento en la duración de las uniones de pareja, ahora las parejas que permanecen juntas duran casi el doble las parejas que siguen juntos que hace un siglo. En la actualidad, la duración media de unos lugares de 43,5 años, comparado con 25 de principios del siglo XX, una cifra que sería en el 49,9 años comparó el promedio de edad de la Unión (la de 1920 se casó con el hombre a la mujer y a 25 y en la actualidad, la edad es de 34 en el caso de los hombres y las mujeres de los 32. La frase “hasta que la muerte nos separe” requiere una mayor convivencia en el siglo XXI que hace un siglo.

 

Cambios en la mortalidad masculina y femenina de la duración potencial de convivencia conyugal tienen consecuencias muy importantes. Así, se comprueba que el principio del estado de viudez, situado hasta hace no mucho en la edad madura, ahora se ha convertido en una transición propia de la vejez. Mayoritariamente se alcanzan los 65 años con pareja, y esto ocurria en sólo un tercio de las parejas en el siglo pasado.

 

También las etapas de juventud y vida adulta son alteradas por el retraso del orfanato. «Los niños vivan más tiempo como niños, que le permite extender la juventud de un modo nunca visto», indican. Porque, mientras que los padres estén vivos, sigue siendo la semilla de la infancia en niños y, frente al padre o la madre, el hijo por va asumiendo el rol de la prole, sin importar la edad que tienes. Esta extensión de la juventud de los padres ha añadido que los investigadores llaman la “revolución de netada”. En este momento, la mayoría de los niños que nacen en el mundo vendido con todos los abuelos y abuelas viven. Y además, el retraso de la mortalidad permite esta relación para durar en el tiempo. Las redes va a vivir con sus abuelos durante mucho tiempo y es incluso probable que el gran saber de tus bisnietos.